El temporal de corrientes sucedido en la madrugada del domingo rompió todos los récords. En sólo dos horas llovió lo que llueve durante todo el mes de marzo, llegando a registrar 206 mm en apenas una hora y dejó como consecuencia una ciudad bajo el agua y cientos de evacuados.
Al igual que en la gran mayoría de las ciudades del mundo, Corrientes está preparada para soportar una lluvia de una intensidad de hasta 50 mm por hora y al verse superada esa cantidad, la red pluvial, los desagües y sumideros no dan abasto. Como sucedió en Nueva York en septiembre 2023, cuando una tormenta de 30 milímetros -176 mm menos que las correntinas- inundó las calles, autopistas y la red de metro de la gran manzana. O el catastrófico temporal que azotó a la ciudad de La Plata en agosto o las ciudades de Bahía Blanca y Capital Federal que durante el mes de diciembre, con unas lluvias de 130 milímetros de agua, se inundaron y en el caso de Bahía Blanca, dejó un saldo de 13 muertos.
Las inundaciones son el principal desastre natural que sufre la Argentina. Desde 1944 hasta 2022 Argentina registró 161 inundaciones, la mayoría de ellas localizadas en la provincia de Buenos Aires. Y aunque ningún Plan Hídrico de ninguna ciudad pueda gestionar 300 mm de lluvia, la existencia del mismo en la ciudad de Corrientes facilita la evacuación y escurrimiento del agua y, de no persistir la lluvia, logrará que las anegaciones cedan en el corto tiempo.
Acciones inmediatas del municipio capitalino y gobierno provincial
Las autoridades informaron que en el transcurso del domingo habilitaron 7 centros de evacuados y dispusieron de 1968 personas para asistir a los damnificados. Asimismo indicaron que, en conjunto con el gobierno provincial, pusieron en la calle 184 vehículos destinados a prestar servicios sanitarios, trasladar mercadería y liberar las calles.